Vecinos en barrio Obrero, al sur de Santiago, donde reside el pastor evangélico Feliz Antonio Báez Ureña, de 71 años, quien está señalado de presuntamente cometer abuso sexual en contra de una menor de ocho años de edad, reaccionaron sorprendidos por la acusación.
Y es que, según dicen, nunca han notado una conducta inadecuada en el religioso.
Ana Veras, residente de ese lugar, indicó sentirse incrédula con la acusación.
Dice estar segura que la acusación es una calumnia que busca hacerle daño al pastor.
La señora califica a Báez Ureña como un hombre serio y dedicado a la iglesia.
«El no es un hombre de eso»
“Aunque no somos de la misma religión, ya que soy católica, les aseguro que él no es un hombre de eso”, expresó Veras, quien tiene 40 años siendo vecina del imputado.
De su lado, Roniel Francisco, también residente en la barriada, señala que en sus 28 años siendo vecinos de Báez Ureña ha escuchado ningún comentario negativo en su contra.
Mientras que Hilario Espinal dice no salir del asombro por la acusación de la presunta agresión violación sexual contra el ahora preso preventivo.
Esperan todo se aclare
Los comunitarios en barrio Obrero esperan que todo se aclare con el proceso judicial.
La Oficina Judicial de Atención Permanente de Santiago le impuso tres meses de prisión preventiva, como medida de coerción, a Feliz Antonio Báez Ureña, de 71 años, por alegadamente abusar sexualmente de una niña de ocho años.
- El imputado enfrenta cargos provisionales presentados por el Ministerio Público por violación a los artículos 309-1, 330 y 333 del Código Penal Dominicano, modificados por la Ley 24-97 de Violencia de Género.
También se le acusa de violar el artículo 396, letras B y C, de la Ley 136-03, que protege los derechos fundamentales de niños, niñas y adolescentes.