KIEV.- «Intensos combates» se registraron este viernes «a lo largo de toda la línea de frente» entre Rusia y Ucrania, afirmó el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, que prometió «destruir» a las fuerzas de «ocupación» que durante la madrugada lanzaron una vasta ofensiva en el noreste de la exrepública soviética.
Rusia lanzó una nueva ofensiva terrestre en la región de Járkov, en el noreste de Ucrania, invadida por Moscú en febrero de 2022.
La zona no había sido blanco de ataques de este calado desde la retirada de las tropas rusas tras la contraofensiva de Ucrania en el otoño boreal de 2022.
«Hay intensos combates a lo largo de toda la línea de frente», declaró Zelenski a finales del día, añadiendo que se habían enviado refuerzos en la región de Járkov.
«A lo largo de nuestra frontera nacional y nuestra línea del frente, destruiremos inevitablemente a las fuerzas de ocupación para frustrar las intenciones ofensivas de Rusia», añadió.
Tras el inicio de la ofensiva, Estados Unidos anunció una nueva ayuda militar de 400 millones de dólares a Kiev.
El jefe de gabinete del presidente ucraniano, Andriy Yermak, aseguró que el paquete incluirá misiles antiaéreos para los sistemas Patriot y NASAMS, así como munición para artillería y lanzacohetes Himars.
Washington trata de compensar los meses perdidos en negociaciones en el Congreso sobre un acuerdo de ayuda a Kiev. El bloqueo durante meses de la ayuda retrasó el flujo de armas procedentes de Estados Unidos, y las fuerzas ucranianas sufrieron reveses en el este.
Rusia «intensificará» su ofensiva en el noreste de Ucrania pero «no prevemos grandes avances» sobre el terreno, afirmó este viernes el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby.
El Estado Mayor ucraniano indicó que Rusia lanzó cinco ataques terrestres en la región de Járkov, cerca de tres localidades fronterizas con Rusia y de otra más al este.
La misma fuente señaló que hubo varios bombardeos rusos en la zona, entre otros contra la ciudad fronteriza de Vovchansk, de 3,000 habitantes.
«ZONA DE SEGURIDAD»
Según una fuente del mando militar ucraniano, Moscú busca crear una «zona de seguridad» en las regiones de Járkov y de Sumy que le impida a Ucrania bombardear la región rusa de Bélgorod, como lo viene haciendo de forma recurrente.
El Ministerio de Defensa ucraniano informó horas antes que «el enemigo» había intentado «romper nuestras líneas de defensa con ayuda de vehículos blindados» hacia las 05H00 de la mañana [02H00 GMT]. No precisó la localización exacta de esta operación.
El ministerio aseguró que los ataques fueron «repelidos», pero que se seguían registrando «combates de diversa intensidad» y que se habían desplegado «unidades de reserva» para «reforzar la defensa» de la zona.
Zelenski también había indicado que Rusia había lanzado «una nueva oleada de acciones contraofensivas» en la zona de Járkov y que Ucrania había respondido «con tropas, brigadas y artillería».
Al menos dos civiles murieron en bombardeos y otros cuatro resultaron heridos en Vovchansk, indicó la fiscalía. Otro civil murió en un ataque aéreo en la localidad de Cherkaski Tishki, en el norte de Járkov, informó el gobernador regional.
La región de Járkov y su capital homónima, segunda ciudad del país después de la capital Kiev, sigue siendo un objetivo clave para el Kremlin.
Rusia bombardeó regularmente la zona en los últimos meses, en particular sus infraestructuras energéticas, y Ucrania temía desde hacía semanas una nueva ofensiva terrestre.
Las autoridades ordenaron la evacuación de civiles alrededor de Vovchansk, informó un representante local al medio ucraniano Hromadske Radio.
EMPUJE RUSO
El ejército ucraniano atraviesa dificultades en el frente, debilitado por la falta de efectivos y los retrasos en la entrega de ayuda occidental, que vació sus reservas de municiones.
Estados Unidos validó a finales de abril una ayuda de 61,000 millones de dólares para la exrepública soviética, pero habrá que esperar que esa asistencia se materialice en el campo de batalla.
Rusia, que cuenta con más hombres, armas y una industria de defensa más potente, retomó la iniciativa tras el fracaso de la contraofensiva ucraniana en el verano de 2023.
Las fuerzas rusas reivindicaron en los últimos meses avances territoriales, principalmente en el este de Ucrania, pero limitados y con un elevado coste humano.
Las tropas rusas avanzaron especialmente en el sector de Avdiivka, conquistada a mediados de febrero.
AFP