Una pandilla atacó un pequeño poblado en el centro de Haití a primera hora del jueves, donde mató a 20 personas, incluidos niños, informó una organización de defensa de derechos humanos.
Otras 50 personas resultaron heridas cuando la pandilla Gran Grif quemó casas y vehículos en la localidad de Pont-Sondé, dijo Bertide Harace, vocera de la Comisión para el Diálogo, la Reconciliación y la Concienciación para Salvar el Artibonite.
“Muchas personas corrieron y abandonaron la zona”, declaró a Radio Kiskeya.
Un video publicado en redes sociales muestra a un grupo de personas huyendo a través de la maleza, entre ellas una mujer que jadeaba mientras decía: “No hay a dónde ir. No hay a dónde ir”. En otro video se puede ver a decenas de personas que empiezan a correr por una calle después de escuchar rumores de que la pandilla se acercaba.
Harace y otras personas criticaron a la policía de la cercana ciudad costera de Saint-Marc, a la que señalaron de no movilizarse para ayudar a las personas que fueron atacadas en Pont-Sondé.
Venson François, un fiscal con sede en Saint-Marc, calificó el ataque como una “masacre” en una entrevista concedida a Radio Caraïbes.
Decenas de personas se reunieron fuera de un hospital de Saint-Marc a donde se trasladó a los heridos, y un hombre dijo a los periodistas que las autoridades locales no hacen lo suficiente para proteger a la población.
El atentado en Pont-Sondé fue atribuido a la pandilla Gran Grif, la cual opera en la región central de Artibonite, y a la cual los expertos se refieren como una de las bandas más crueles de Haití. Esta pandilla ha tomado el control de más territorio desde 2022 bajo el mando de Luckson Elan —a quien el Departamento del Tesoro de Estados Unidos le impuso sanciones el mes pasado.
La pandilla Gran Grif fue acusada en enero de 2023 de atacar una comisaría de policía en Liancourt, cerca de Pont-Sondé, y de matar a por lo menos seis agentes. Los actos de violencia de la pandilla también obligaron a que un hospital que atendía a más de 700.000 personas pusiera fin a sus operaciones en febrero de 2023.
El exlegislador haitiano Prophane Victor, quien representaba al departamento de Artibonite, comenzó a armar a jóvenes que eventualmente conformaron la pandilla Gran Grif para garantizar su elección y el control de la zona, según un informe de la ONU. Estados Unidos también impuso sanciones sobre Victor el mes pasado.
La pandilla cuenta con unos 100 integrantes y ha sido acusada de delitos como asesinatos, violaciones, robos y secuestros, según el informe.
Aunque la mayor parte de la violencia de pandillas se concentra en la capital, Puerto Príncipe, en los últimos años se ha extendido a la región de Artibonite, donde se produce gran parte de los alimentos del país.