La Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD) procedió este martes a la demolición del edificio de tres niveles que se encontraba a punto de colapsar sobre la cañada Las 30, en el kilómetro 13 de la autopista Duarte, dándole descanso a los comunitarios.
En un comunicado, la CAASD afirma que “en esta ocasión se procedió a la demolición de esta infraestructura la cual estaba encima de la cañada e impedía la continuidad de los trabajos de saneamiento”.
Indica que la institución, dentro de su programa de saneamiento de cañadas, trabaja con el reacondicionamiento de las viviendas alrededor de esos afluentes y la construcción de otras nuevas.
En su informe, la institución asegura que “en casos como estos la Corporación reubica a las familias afectadas o les retribuye de una manera justa a los propietarios del inmueble”.
En tanto que, en el lugar, en el sector Ángeles de Los Peralejos, en el Distrito Nacional, los vecinos lamentaron la situación, mientras algunos comentaron que las autoridades no le habían entregado el dinero prometido al propietario del inmueble, según les dijo una mujer que rondaba por el lugar y que se había identificado como la esposa del dueño.
Los residentes de la zona expresaron su alivio tras la rápida intervención de las autoridades, que respondieron al riesgo de colapso de la estructura, la cual presentaba grietas preocupantes en las columnas y una inclinación alarmante, que aumentaba día tras día debido a las lluvias.
Wendy Mendez, residente en el lugar manifestó: “ya quitaron lo que daba tormento” expresión que engloba el sentir de los demás residentes, como Marisol Pichardo quien dijo que se siente bien, porque ese esta un peligro muy fuerte, si se caía era una desgracia”.
«Gracias a Dios vinieron rápido las autoridades, vinieron mucha gente, no nos podemos quejar”, agradeció Pichardo.
En representación del Ayuntamiento del Distrito Nacional, se encontraban en el lugar Anni Ruiz, como fiscalizadora de Aseo Urbano y Equipos del Ayuntamiento, quien le había dado seguimiento a la denuncia.
Este lunes, Diario Libre informó sobre el inminente peligro que mostraba la estructura inclinada del edificio, que exhibía grietas preocupantes en las columnas que lo sostenían. Según los residentes “en solo cuatro días el nivel de inclinación aumentó”, por lo que temían que ocurriera una desgracia debido a las continuas lluvias que lo debilitaban cada minuto, mientras las autoridades y el propietario no llegaban a ningún acuerdo.