La exjefa del Estado argentino Cristina Fernández (2007-2015) se estrenó este domingo como nueva presidenta del Partido Justicialista (PJ, peronista) en un acto político en el que defendió el Estado y su labor para salvar a los ciudadanos cuando quedan desamparados.
Este domingo, 17 de noviembre, fecha en la que se celebra el Día de la Militancia Peronista y que coincide con la efeméride del regreso, en 1972, de Juan Domingo Perón a Argentina tras 18 años en el exilio, se iba a celebrar una consulta interna del PJ para escoger a su presidente, pero se suspendió al quedar Fernández como única candidata.
Cristina Fernández eligió la ciudad de Santiago del Estero, en el norte de Argentina, para presentarse como la nueva dirigente justicialista y referente de la oposición al Gobierno de Javier Milei.
Ese cargo quedó desierto en agosto cuando Alberto Fernández renunció tras ser acusado de violencia de género por su expareja Fabiola Yáñez.
“Estamos dispuestos a discutir un Estado eficiente. Tenemos que poder construir un Estado necesario para poder implementar un desarrollo económico con valor agregado, con innovación y tecnología, para que los que se cayeron puedan ser incluidos en el circuito”, dijo en respuesta al desmantelamiento de las instituciones públicas que está llevando a cabo Milei.
Fernández pidió unir fuerzas, lo que se interpretó como un guiño a la Unión Cívica Radical (UCR), donde muchos de sus integrantes son críticos del Gobierno de Milei pero mantienen importantes diferencias con el kirchnerismo.
“Es muy bueno recordar nuestra historia, pero deberíamos reformular. Incorporaremos a todos los militantes de otros partidos políticos y sociales, de las iglesias, de las empresas”, manifestó.
También tuvo palabras duras contra contra Milei, al que acusó de alejarse del pueblo y a quien calificó de «koala«, en alusión a las fotografías al lado de Trump difundidas esta semana.
“¿Vieron que Milei va siempre a lugares donde hay millonarios? Nunca a una escuela, a una pyme, a un sindicato”, destacó al mencionar que antes de viajar a Estados Unidos para reunirse con Donald Trump, el presidente asistió el jueves a una cena donde los comensales pagaron miles de dólares.
Citó a Elon Musk, de quien dijo: “Vean, además de tener 100 % protección de sus autos eléctricos contra los chinos, su empresa Tesla empezó con un préstamo de 465 millones de dólares del Estado”, al recordar que hasta en EE.UU. el Estado impulsa las empresas y la innovación.
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La expresidenta argentina enumeró lo que consideró fueron logros de su Gobierno. Habló de cómo salieron adelante tras la crisis económica de 2008, de cómo pagaron a los ciudadanos el ‘corralito’ en cuotas, de cómo el país se convirtió en un referente mundial cuando enarboló “las banderas de la memoria, verdad y justicia”.
Fernández inició este domingo una campaña política que busca recomponer el peronismo de cara a las elecciones legislativas de 2025, días después de haber sido condenada en segunda instancia por corrupción y de que el Gobierno de Milei dejara en suspenso sus pensiones de expresidenta y viuda de presidente.
Sus abogados anunciaron que la ahora presidenta del Partido Justicialista recurrirá ante la Corte Suprema la condena de corrupción, que Fernández considera responde a una persecución política y judicial. También reclamará por la vía judicial sus pensiones suspendidas.
