Catar entregó a Israel y Hamás una versión “final” de un acuerdo sobre un alto el fuego y la liberación de los rehenes de Hamás, según indicó un responsable de las negociaciones.
En Doha se logró un gran avance en estas negociaciones la noche de este domingo tras las discusiones entre los jefes de servicios de la inteligencia israelí, el enviado al Medio Oriente del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, y el primer ministro de Catar, según señaló un responsable de las negociaciones.
Los familiares de los 98 israelíes que aún permanecen rehenes en Gaza, oscilan entre la angustia y el optimismo frente a las noticias provenientes de Doha.
Allí se encuentran desde hace varios días delegados israelíes y de Hamas, y los intermediarios Cataríes, quienes cuentan con la intervención de enviados especiales de dos presidentes estadounidenses, el saliente Joe Biden y el entrante Donald Trump.
Meses de negociaciones
Después de meses de negociaciones estériles, las partes estarían más cerca que nunca del alcance de un acuerdo de cese el fuego e intercambio de secuestrados por prisioneros, en una primera etapa considerada humanitaria.
El martes pasado había visitado Doha una delegación israelí, compuesta por el jefe del Mossad, David Barnea, y el jefe del Shin Bet, Ronen Bar, quienes regresaron el sábado para continuar las negociaciones.
Además, el jefe de la Administración de Prisioneros Palestinos, Qadura Fares, parte este lunes a Catar con el propósito de recibir una actualización sobre las identidades de los presos palestinos que serían liberados en la fase humanitaria. La lista incluirá prisioneros enfermos y ancianos, mujeres y niños.
De no producirse sorpresas, se estima que la primera fase del tratado pueda implementarse paralelamente al ingreso de Donald Trump a la Casa Blanca, dentro de una semana.