Cientos de personas marchan la mañana de este miércoles en las provincias Sánchez Ramírez y Monseñor Nouel, exigiendo que Barrick Pueblo Viejo se ajuste a las normativas internacionales para el reasentamiento de las familias que serán desplazadas por la construcción de una presa de colas de la minera.
Los manifestantes, tras un extenso recorrido, tienen previsto llegar a la parte frontal de la multinacional, donde realizarán una concentración. La protesta ha generado un extenso tapón en la carretera que enlaza a Cotuí con Maimón.
La jornada fue organizada por líderes religiosos y dirigentes campesinos de ambas provincias.
La manifestación fue convocada luego de un incidente que dejó ocho personas heridas, entre ellas un sacerdote, durante una protesta en demanda de la reubicación de unas 600 familias que serán afectadas por la obra.
Los líderes religiosos y dirigentes campesinos exigen igualdad en el diálogo que sostienen con los ejecutivos de la minera para poner fin al conflicto.
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Además, rechazan que la minera siga trabajando en la construcción de una carretera, alegadamente contaminando sus fuentes acuíferas, sin antes realizar el desalojo.
Asimismo, condenan que el Gobierno dominicano mantenga sus comunidades militarizadas en apoyo a la obra que realiza Barrick Pueblo Viejo.
Los manifestantes aclaran que están en la disposición de vender sus predios, pero a un precio justo.
Entre las comunidades que serán impactadas por la presa de colas están El Rayo, Los Naranjos, Los Higo, La Tres Boca, Arroyo Vuelta, Zambrana y Las Lajas.
Ambas marchas son vigiladas por efectivos de la Policía Nacional y escoltadas por agentes de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (DIGESETT).
Los participantes en las movilizaciones portan pancartas con mensajes alusivos a sus demandas.
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