Numerosos habitantes de Goma, en el este de la República Democrática del Congo, han partido precipitadamente de la ciudad a causa de los disparos y las detonaciones de combatientes del M23 apoyados por soldados ruandeses.
La RDC denunció ante la ONU el ingreso de más tropas ruandesas a su país, una acción que definió como una ‘declaración de guerra’.
Disparos intensos
El domingo y el lunes por la mañana aún se escuchaban disparos, incluso en el centro de la ciudad. Disparos intensos, tanto de armas ligeras como de artillería pesada, resonaron en el centro de Goma. Los habitantes están refugiados en sus casas; el agua y la electricidad están cortadas.
Miembros de las fuerzas especiales ruandesas y combatientes del grupo M23 penetraron la noche anterior en varios barrios de la gran ciudad del este de la República Democrática del Congo (RDC). Varias fuertes detonaciones fueron escuchadas por periodistas de la AFP en el lugar, mientras el caos se extendía en la ciudad.
El grupo armado antigubernamental M23, apoyado por unos 3,000 a 4,000 soldados ruandeses según la ONU, combate al ejército congoleño en la región desde hace más de tres años, pero el cerco se ha estrechado en los últimos días.
Frontera cerrada
La frontera en Goma, que separa la RDC de Ruanda, «está cerrada», indicó a RFI una fuente consular europea, confirmando la información de testigos.
«Nadie entra, nadie sale, salvo algunos miembros del personal de la ONU y sus familias evacuadas esta mañana», añadió a la AFP un trabajador humanitario presente en el principal punto de paso entre la RDC y Ruanda.
Según informaciones de RFI, combatientes del M23 y miembros de las fuerzas especiales ruandesas están presentes en algunos barrios de Goma, especialmente en la zona del aeropuerto, en el barrio norte de la capital de Kivu del Norte.
El domingo, la responsable de la misión de la ONU en la RDC, Bintou Keita, participó en la reunión del Consejo de Seguridad dedicada a la situación en la RDC. Allí informó que el aeropuerto ya no es funcional para evacuaciones ni para operaciones humanitarias. Las carreteras que llevan a Goma también están cortadas, afirmó.
Autobuses están posicionados en la frontera ruandesa, listos para evacuar al personal de la ONU y sus familias que vienen de Goma, según la televisión pública ruandesa RBA, informa la Agencia France Presse.
«Los miembros del personal de la ONU y sus familias que han trabajado en la RDC» están siendo evacuados de Goma, con autobuses en la frontera «esperando para transportarlos hacia Kigali, donde embarcarán en vuelos hacia sus respectivos países», indicó RBA en X. No hay agentes de inmigración en la frontera, según nuestras informaciones.
La intensificación de los combates por la noche cerca de Goma y luego los disparos en la ciudad también han empujado a los habitantes de la capital provincial a cruzar la frontera hacia Ruanda, a la ciudad fronteriza de Gisenyi, en el distrito de Rubavu, donde se encuentra la corresponsal de RFI, Lucie Mouillaud.
Frente a la Gran Barrera, Nathan y su familia son de los últimos residentes de Goma en cruzar antes del cierre de la frontera a media tarde del domingo: «En estos momentos Goma es un campo desierto. No hay corriente eléctrica, no hay agua, la población trata de sobrevivir. Escuchamos detonaciones cada vez más fuertes. Escuchamos incluso disparos. Yo los escucho desde mi cuarto. Creo que esto fue lo que alertó a mi padre y por eso decidimos evacuar la ciudad».
«Tenemos miedo, estamos abandonando nuestras pertenencias. Solo llevo conmigo un pequeño bolso y la familia. Abandonamos todo. Estamos con lo que llevamos puesto. Perdimos toda estabilidad. No sabemos cuánto tiempo nos vamos a quedar aquí. Vamos a ver cómo evoluciona la situación. Cuando las cosas se calmen, regresaremos, porque Goma es nuestro hogar», dice Alain Hemedi, otro habitante que ha abandonado la ciudad.
Para muchos, cruzar la frontera no es más que una etapa en el camino hacia Bukavu u otras ciudades de Burundi o Uganda.
«Lo que más deseamos es el restablecimiento de la paz. Vivimos de esta esperanza desde nuestra infancia. Todo el mundo espera que volvamos a recobrar la paz«, afirma Axel Cikomero, comerciante en Goma.
La ONU pide a Ruanda retirar sus tropas
En una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU el domingo, la canciller de RDC, Thérèse Kayikwamba Wagner, denunció el ingreso de más tropas ruandesas a su país, una acción que definió como una «declaración de guerra».
Desde Nueva York, la ONU pidió a Ruanda que retire sus tropas de la región y cese su apoyo al grupo rebelde, que ha intensificado sus combates contra el ejército congolés.
La ministra exigió al Consejo de Seguridad «sanciones selectivas» contra «miembros identificados en la cadena de comando de las fuerzas armadas ruandesas» y «los responsables políticos de esta agresión».
Reclamó también un «embargo total sobre las exportaciones de todos los minerales etiquetados como ruandeses, en particular el coltán y el oro«.
En los últimos años la rebelión del M23, un grupo mayoritariamente de etnia tutsi, se ha apoderado de grandes extensiones de territorio en el este de RDC, alegando defender a la población tutsi del Congo.
El sábado se informó de la muerte de trece cascos azules, incluyendo uno uruguayo, en combates con el M23.
La Unión Europea instó al M23 a «detener su avance» y a Ruanda a «retirarse inmediatamente» en una declaración firmada por los 27 países miembros. La Unión Africana (UA) pidió «el estricto cumplimiento del alto el fuego acordado entre las partes» en julio.
El conflicto, que dura ya más de tres años, está agravando una crisis humanitaria crónica en la región. Según la ONU, 400,000 personas se han visto desplazadas por los combates desde principios de enero.
La ONU empezó a evacuar a parte de su personal de Goma. Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Alemania pidieron a sus ciudadanos que abandonen la ciudad mientras el aeropuerto y las fronteras estén abiertos.