La empresa Apache Dominican Republic Corporation -filial de la estadounidense Apache Corporation- abandonó la exploración y búsqueda de petróleo en el mar Caribe, al sur de San Pedro de Macorís, que comenzó en el año 2020.
El director del Servicio Geológico Nacional (SGN), Edwin Rafael García Cocco, reveló que la empresa detuvo las actividades resultantes de un contrato que firmó con el Estado dominicano. Esto ocurrió luego de que encontró un gran pozo de petróleo en Guyana.
Antes de marcharse, entregó un informe al Ministerio de Energía y Minas con sus hallazgos. Aunque no llegaron a encontrar el preciado hidrocarburo, no lo descartó.
“Apache se retiró, pero eso no significa que no halla, porque Apache fue la que encontró el gran pozo en Guyana”, razona el titular del SGN.
El geólogo considera que el resultado no fue negativo, porque se “encontraron burbujas muy grandes de gas” y “donde hay gas hay petróleo”.
“Ellos dicen que no descartan completamente, pero que ahora mismo no les es factible económicamente, porque es muy costoso”, indica.
El experto asegura que aquí debe haber yacimientos del oro negro. “Viéndolo así, desde afuera, sin complicarlo mucho, aquí hay todas las condiciones para que haya petróleo”, afirma.
Apache fue la única empresa que se interesó en uno de los 14 bloques de exploración que se ofertaron en la licitación: el bloque SP2. Comprende un área de 2,535 kilómetros cuadrados y una profundidad entre 800 y 1,400 metros.
Haría el sondeo por un primer período de cuatro años, prorrogables hasta 10, con una inversión de 5 millones de dólares.
García Cocco subraya que el Estado está haciendo el importante trabajo de realizar los estudios previos que ofrezcan mayor precisión sobre el potencial petrolífero del suelo para atraer el interés de los capitales extranjeros.
Para eso, la Refinería Dominicana de Petróleo (Refidomsa) hizo una investigación que reveló en agosto pasado una existencia probable de 498 millones de barriles, de los cuales se pueden recuperar 74.3 millones.
Energía geotérmica
El funcionario destacó el potencial geotérmico del país, particularmente en un eje que se extiende desde Guayabal, norte de Azua, hasta Constanza. En esta región existen manifestaciones naturales como aguas termales, travertino y emisiones de azufre, lo que sugiere la presencia de antiguos volcanes extintos. Este tipo de energía se genera a partir del calor del subsuelo para producir electricidad.