Este 9 de marzo, el Gobierno israelí ordenó interrumpir el suministro de electricidad a la Franja de Gaza, aumentando la presión sobre Hamás, una semana después de bloquear el paso de la ayuda humanitaria. Este lunes, una delegación israelí viaja a Doha para reanudar las negociaciones.
Sorprendido por la nueva diplomacia estadounidense, Benjamin Netanyahu se vio prácticamente forzado a despachar una delegación de negociadores a Doha, para tratar la segunda etapa del acuerdo de intercambio de prisioneros y la prolongación de la tregua en la Franja de Gaza.
Hudna
Después de la confirmación de un diálogo directo entre el enviado del presidente Trump para asuntos de rehenes, con el alto funcionario de Hamás Khalil al-Hayya, Adam Boehler afirmó que «en gran medida» Hamas se alinea con las demandas israelíes:
La liberación de todos los rehenes en cuestión de semanas. El desarme de la organización. Su alejamiento de las posiciones de poder en la Franja de Gaza.
Según Boehler, Hamás propuso una «hudna«, un alto el fuego de entre cinco y 10 años, durante los cuales Estados Unidos y otros países supervisarán que la organización no represente una amenaza para Israel.
Esquema de Witkoff
Sin embargo, fuentes israelíes afirmaron que sólo se discutirá el «esquema de Witkoff«. De acuerdo con el mismo, inicialmente se declararía un alto el fuego de dos meses entre ambas partes.
En el primer día, se liberarían la mitad de los rehenes vivos y los cuerpos de los fallecidos a cambio de prisioneros de seguridad. Al final del período, si se alcanza un acuerdo para un alto el fuego permanente, se liberaría al resto de los rehenes.