Rusia y Ucrania intensificaron los ataques aéreos, a pesar de las presiones del presidente Trump para que acuerden un alto el fuego más de tres años después del inicio del conflicto.
Dos personas murieron en bombardeos rusos nocturnos en el este de Ucrania, donde un ataque con más de 170 drones causó 10 heridos y provocó incendios a cientos de kilómetros del frente.
El ataque ruso
Rusia, por su lado, lanzó una treintena bombas que causaron dos muertos y varios heridos. El ataque ruso con drones a la ciudad de Kropivnitski, a cientos de kilómetros de la línea del frente, hirió a 10 personas, entre ellas cuatro niños, afirmaron las autoridades.
«Kropivnitski sufrió el ataque enemigo más masivo. Edificios residenciales pacíficos fueron destruidos», declaró el gobernador de la región, Andrii Raikovich.
«Esto es lo que parece un alto el fuego de Putin. Rusia ataca a civiles con gran placer», escribió en las redes sociales el asesor presidencial Andrii Yermak.
Rusia lanzó en total 171 drones contra Ucrania, de los cuales 75 fueron derribados, informó la Fuerza Aérea ucraniana.
Los otros 63 drones no fueron interceptados pero no causaron daños, agregó la fuente.
Por su parte, Rusia anunció que derribó en la noche 132 drones ucranianos, durante un ataque que causó dos heridos y un incendio en una base aérea.
54 drones interceptado
En la región de Saratov, a unos 700 km de Moscú, fueron interceptados 54 drones y otros 40 en la región vecina de Voronej, indicó un comunicado del ministerio ruso de Defensa.
Saratov, capital de la región del mismo nombre, y la ciudad de Engels «sufrieron hoy el ataque más masivo de drones» desde el inicio de la operación militar rusa en Ucrania en febrero de 2022, afirmó en Telegram el gobernador de la región, Roman Busargin.
El ataque provocó «un incendio en el territorio de la base aérea» en Engels y la «evacuación de los habitantes» de las viviendas aledañas, precisó.
El ataque dejó además dos heridos en Engels, donde resultaron «dañados dos jardines de infantes, un hospital y una escuela», informaron las autoridades.
El presidente Donald Trump habló por teléfono el miércoles con su homólogo ucraniano, Volodimir Zelenski, y propuso que Estados Unidos tome posesión de centrales eléctricas en Ucrania porque sería la «mejor protección y apoyo posibles».
El jefe de Estado ucraniano se mostró dispuesto a suspender los ataques a infraestructuras civiles y energéticas en Rusia, después de que el mandatario de ese país, Vladimir Putin, se comprometiera el martes a preservar temporalmente el sector energético en una llamada con Trump.
«Uno de los primeros pasos hacia el final de la guerra podría ser suspender los ataques contra las infraestructuras energéticas y otras infraestructuras civiles», dijo el dirigente ucraniano en la red social X.
Precisó que en la conversación solo se habló de «una central, que está bajo ocupación rusa», es decir la de Zaporiyia, en el sureste.
Por parte de Washington, al menos en apariencia, el tono se ha suavizado claramente en comparación con la abierta hostilidad con la que el presidente ucraniano fue recibido recientemente por Trump en la Casa Blanca.
«Hoy no sentí ninguna presión. Eso es un hecho», declaró Zelenski a los periodistas. En un mensaje en X, calificó la conversación de «positiva, muy sustancial y franca».
Un comunicado oficial estadounidense insiste en que Zelenski, acusado de ingratitud por algunos funcionarios, ha «agradecido» varias veces a Trump su labor.
«Acabo de mantener una muy buena llamada con el presidente de Ucrania (…). Gran parte de la conversación se basó en la llamada de ayer con el presidente Putin para alinear las demandas y necesidades tanto de Rusia como de Ucrania. Estamos muy bien encaminados», escribió el magnate republicano en su red Truth Social.
La llamada tuvo lugar poco después de que Rusia y Ucrania anunciaran haber intercambiado 175 prisioneros de guerra de cada bando.
En Londres, los jefes de Estado Mayor de una treintena de países dispuestos a contribuir a las garantías de seguridad para Ucrania se reúnen este jueves para discutir un plan de mantenimiento de la paz en caso de un alto el fuego con Rusia.
El expediente ucraniano y la defensa europea frente a la amenaza rusa también están en la agenda de una cumbre de la UE en Bruselas este mismo día.