POR MARCOS SANTOS.- Más allá de que los procesos electorales son distintos, el actual a quien suscribe, será recordado por el inmerecido e irrespetuoso “boche” recibido por parte de una ex candidata a un cargo electivo de la ciudad de San Francisco de Macorís.
Si bien es cierto, que los que terciaron para la alcaldía de la ciudad del Jaya, enarbolaron propuestas, las presentes elecciones congresuales, se muestran como una contienda carente de las mismas, sobre todo en lo que concierne a los aspirantes a diputado por la provincia Duarte.
El actual senador y candidato a la misma posición por el PRM, Franklin Romero, y su contendiente Luis Yanguela del PLD, han llevado una campaña de altura, de respeto mutuo, y de propuestas presentadas en distintos escenarios, llegando incluso a debatir sobre distintos tópicos locales y nacionales.
Sin embargo, no ha sucedido así entre los que aspiran a seguir o ganar una curul en la Cámara de Diputados de la República Dominicana.
Aunque el programa de televisión de Roberto Neris por el canal 10 de Telenord, auspició un debate entre los candidatos a diputado por la provincia Duarte, el mismo no llenó las expectativas, y me parece que algunos aspirantes no participaron en el mismo.
Las acciones para intentar conseguir simpatías y que las mismas se conviertan en votos el domingo 19 de mayo, se ha limitado a acciones insulsas y hasta poco creativas.
Me parece que de cara al futuro, porque ahora es muy tarde, debemos exigirle a quienes pretenden representarnos en el Congreso Nacional, y específicamente en la cámara baja, que nos presenten una agenda legislativa con temas concretos y no con discursos aéreos y alejados de la realidad nacional.
Sin dudas, este es el deseo de muchos ciudadanos comprometidos y preocupados por el destino de nuestro pueblo y de nuestra provincia, que desea ver a candidatos que nos representen dignamente.
Un deseo bien intencionado.
Ojalá, y que uno de los tantos aspirantes a diputado que tenemos en la provincia Duarte, no se atreva a llamarme o escribirme vía WhatsApp, para faltarme el respeto, y querer echar por la borda una carrera de treinta años de manera ininterrumpida en los medios de comunicación, como me sucedió con el artículo anterior.
El célebre boche, a mi entender, fue motivado por chismes entre aliados, ex aliados y ahora compañeros de causa en casa ajena.
Sin dudas, hay personas que tienen dinero y creen tener Patente de Corso, para tal cosa o la otra.
Hasta la próxima……..